Se termina otro año más.

Se está acabando el año...y ha pasado tan rápido...no me ha dado tiempo a verlo, a asimilarlo...han pasado tantas cosas...que no sé cómo hacer un buen balance de todo lo que he sentido, he pensado, he vivido...
No todo ha sido malo, aunque, por desgracia, muchas veces nos quedan marcadas más cosas malas que buenas...no sé si porque nos hacen más daño o porque simplemente la raza humana es así de incoherente...
Durante este año he dejado entrar en mi vida personas maravillosas, personas que se han convertido en esenciales para mí, personas por las que hoy, daría muchas cosas y a las que agradecer tantas y tantas cosas y tantas y tantas sonrisas que me regalan y me hacen sacar...
Cierto es, que también han salido algunas otras pero esas, no merecían estar ahí...sencillamente porque nunca han estado ahí realmente, por lo que no voy a malgastar palabras en ellas.
Empecé el año con un viaje inesperado, un viaje mágico, un viaje que era un sueño...y que gracias a dos personas maravillosas pude hacer realidad...y cuando lo pienso sigo emocionándome tanto que soy incapaz de retener las lágrimas...también comencé el verano en la ciudad del amor y la magia...un lugar que está hecho para los enamorados...cada calle es algo maravilloso y esa torre que parece tocar las nubes...
De la ciudad del amor...pasé a tocar esa sensación...duró poco, muy poco pero me hizo sentir la persona más feliz del mundo por un momento...sucedió lo que pensé que jamás podría suceder...y a partir de ahí han caído muchas lágrimas, ha habido malos momentos...pero me levanté, poco quizás...porque todo volvió a suceder y volvió a haber más de lo mismo...pero hoy no voy a contar nada malo, voy a sacar todo lo bueno...y a malas que parezca, eso, es una de las mejores cosas que podría haberme pasado este año...¿estoy loca? no...no lo estoy...simplemente, lo que sentí en ese momento, lo que me hizo sentir, por mucho daño que me hiciera después...fue tan mágico...que no puede ser malo, es imposible...
Y así, me doy cuenta que no ha sido tan mal año...simplemente, siempre pienso en lo malo...pero también hay momentos que no cambiaría por nada del mundo, es más, viviría en ellos toda la vida...